Curiosidades sobre la Catedral de Nidaros en Trondheim

De todos los viajes a Noruega que puedes hacer, la ciudad de Trondheim, antigua capital vikinga, es un destino que no te puedes perder. Es una ciudad moderna y con mucha vida, con muchos lugares de entretenimiento y de interés.

La Catedral de Nidaros es el símbolo por excelencia de Trondheim y una de las visitas obligatorias si estás por la ciudad. Para conocer la Catedral no es suficiente con admirarla, aunque ya sea algo realmente fabuloso. Conocer las curiosidades sobre la Catedral de Nidaros, en Trondheim, hará que veas su belleza desde varias perspectivas distintas, todas ellas increíbles y a no olvidar. Sus historias, sus características y los datos menos conocidos son información valiosa para sacar el máximo provecho a tu visita.

Curiosidades sobre la Catedral de Nidaros

Hubo un tiempo en que Trondheim se llamaba Nidaros, que en noruego antiguo significa “boca del rio Nid». Sin embargo, con la reforma protestante en la zona, aparte de desaparecer el arzobispado, la ciudad perdió su nombre original. Y, aunque con la independencia noruega se intentó recuperar el nombre Nidaros, la ciudad se quedó oficialmente con el nombre Trondheim. A pesar de tantos cambios, el nombre de la Catedral se ha mantenido igual desde que se empezó a erguir en 1070.

Si bien el nombre no cambió, la Catedral en sí ha tenido que ser reconstruida numerosas veces desde que se completó, alrededor del año 1300.

Aunque su construcción es principalmente gótica, se pueden ver partes más antiguas con estilo romano. Los numerosos incendios que sufrió a lo largo de los años hicieron que, actualmente, cuente también con algunos elementos barrocos.

Si vas a viajar a la región de trondelag, es una parada obligatoria desde la que puedes ver una de las ciudades con más historia de Noruega.

Catedral medieval más septentrional del mundo

Visitar la Catedral de Nidaros es disfrutar del símbolo de la ciudad, de su historia y de su increíble arquitectura. Sin embargo, también podrás decir que has estado en la Catedral medieval más septentrional del mundo y dónde se encuentra enterrado San Olav, el rey vikingo que llevó el cristianismo al país.

Su fachada está llena de detalles, llamando la atención las esculturas de los santos y reyes que se añadieron alrededor del rosetón durante una de las restauraciones que se hicieron en la Catedral. Pero también por dentro hay mucho a descubrir. En su interior encontrarás tumbas de la Edad Media que hacen parte de la historia de esta bella ciudad.

Según la estación del año en la que realices la visita, tu experiencia será totalmente distinta, así que vale la pena ir más de una vez. Durante los meses de otoño e invierno se forman esteatitas que le dan un aspecto único y realmente gélido mientras que en primavera y verano te sorprenderás con los rayos de sol atravesando el rosetón e iluminando la catedral con una luz increíble.

Además de la visita a la catedral, no dejes de visitar el Palacio Arzobispal, considerado unos de los mejores Palacios de Noruega y en el que encontrarás, aparte de las joyas de la corona, un museo militar con uniformes de diferentes épocas.

Visible desde prácticamente cualquier punto de Trondheim

Independientemente del punto en el que te encuentres de la ciudad, lo más probable es que consigas ver la imponente Catedral. Y desde la torre de la Catedral también podrás disfrutar las vistas de toda la ciudad. Vale la pena subir los 172 escalones que te llevarán a la parte superior y desde dónde las vistas te impresionarán.

La posibilidad de ver una ciudad desde un punto elevado es, ya de por sí, increíble. Pero hacerlo desde un monumento de inmensa trascendencia en la cultura del país hace que todo sea incluso más mágico. Tendrás las mejores vistas y parte de la historia del país a tus pies.

Noruega es un país de contrastes y lo podrás ver desde lo más alto de la Catedral pero también en las diferencias arquitectónicas que encontrarás en las distintas ciudades. Para verlo con más claridad, visita el museo Munch y podrás apreciar obras de arte famosas y comparar las diferencias arquitectónicas abismales que tiene con la Catedral de Nidaros. Otro monumento a no perder y que contrasta con la arquitectura que encuentras en la catedral es la Ópera Oslo, otra visita imprescindible que puedes añadir a tu viaje o a tu lista de próximos viajes a disfrutar.

Acoge la tumba de San Olav

El origen de la Catedral está muy ligado a San Olaf, rey de Noruega muerto en la batalla de Stiklestad y cuyo cuerpo fue enterrado junto al río. La leyenda cuenta que, al exhumar el cuerpo, este se encontraba intacto y dio inicio al culto y posterior canonización de San Olav, el santo patrón de Noruega. Supuestamente, en su tumba se hizo la construcción de una capilla y, posteriormente, la Catedral de Nidaros. En el local original de la tumba se puede encontrar ahora el octógono de la Catedral.

Son muchas las leyendas, historias y milagros que se puedan contar a respecto de San Olav. En una de ellas se cuenta como Olaf llevó el cristianismo a Noruega sacrificando su vida.

Cierto es que, durante el periodo en el que Dinamarca y Noruega estaban unidos, la corona de Dinamarca no tenía interés en mantener viva la historia del rey Olaf, gran opositor de la conquista danesa. Pero, una vez restablecida la independencia, la Catedral de Nidaros recuperó su fuerza y poder siendo el lugar de coronación de los reyes noruegos.

Hay un certificado de La ruta de peregrinación a la catedral de Nidaros

Durante la Edad Media, la Catedral de Nidaros era uno de los principales destinos de peregrinación para los cristianos. Posteriormente, durante la reforma protestante, y cómo era de esperar, perdió su importancia como centro de peregrinación y culto, habiendo sido recuperada recientemente gracias al interés de los turistas por su historia y, también, por el trabajo de la Oficina del Peregrino en Oslo y el Centro de Peregrinos en Trondheim.

El Camino de San Olaf cubre 5 mil km y su itinerario principal, que une Oslo con Nidaros, tiene 650 km. Aunque parezca una distancia muy larga, vale la pena hacerla y conseguir el certificado con el que el Centro de Peregrinos de Trondheim condecora a los peregrinos que terminan el camino.

Si decides hacer la ruta, guarda algunos días para reponer energías en Oslo y aprovecha el tiempo para disfrutar de esta ciudad. No te puedes perder el Parque de esculturas de Vigeland Park donde descubrirás una nueva forma de ver los estados de ánimo.

Planificar un viaje a Trondheim puede resultar de lo más emocionante pero también agotador. Hay tantas visitas a no perder que, tenerlas todas en cuenta, resulta complicado si nunca has estado allí. Contar con la experiencia de una agencia especializada en Noruega, como Noruega tours, que organiza y personaliza los viajes que mejor se adapten a ti es la mejor forma de hacer tu viaje un acontecimiento realmente increíble. Además, Noruega tours te asesora en todo momento para que sepas todo lo que necesitas para tu viaje. Contar con sus experiencias y conocimiento de la zona es ideal para no perderte nada durante tu visita.